miércoles, 4 de junio de 2008

"Nos desprendemos de un cuerpo inexistente en el momento que olvidamos todo lo que estamos dejando bajo nuestros pies, y comenzamos a renacer como personas porque nos volvemos inherentes a todo y obligamos a nuestros sentidos a potenciarse.
No creemos que podemos, ni sabemos que es lo que hacemos, porque no existe un tiempo que transcurra, ni nadie que nos lo recuerde. Somos todos iguales, casi como una simetría individual que no busca diferenciarse, porque no hay necesidad; y sin embargo nos volvemos mas humanos, nos acercamos a la materia, no como un producto sino como una transicion hacia la inmaterialidad ... Dejamos de vivir, para volver a nacer, tal vez de un modo mejor..."